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Kim Kardashian ha demostrado en los últimos años su gusto por rescatar diseños icónicos del mundo de la moda, desde piezas de Thierry Mugler y Dolce & Gabbana al icónico vestido de Marilyn Monroe para cantar Happy Birthday Mr. President a John Kennedy. ¿Serán los looks de Lady Di su próximo objetivo? Repasamos aquellos looks de Diana que se subastaron y podrían caer en manos de Kim para sus próximos looks de alfombra roja.

Hace tiempo que las celebrities dejaron de mirar a las últimas colecciones presentadas sobre la pasarela para elegir sus looks estelares. Vestir un diseño vintage que cuente una historia, que tenga un aura especial y haga viajar en el tiempo, recordando el trabajo de algún grande de la moda, inspirándose en alguna de las mujeres icónicas que marcaron época por su estilo... se impone en el mundo de la moda.

De Kim Kardashian a Bella Hadid, pasando por Gwyneth Paltrow o Chiara Ferragni, son muchos los rostros famosos que llevan varias temporadas firmando su mejores outfits gracias a diseños que fueron creados y cosidos hace décadas. Precisamente Kim Kardashian ha revisado el archivo de Thierry Mugler en los últimos años, luciendo desde un vestido de lentejuelas con efecto piel de 1983 hasta un Alta Costura de la Primavera de 1998.

Pero su amor por las piezas vintage no acaba ahí. Hace solo unas semanas, se convertía en la gran protagonista de la gala MET recuperando el vestido que lució Marilyn Monroe para cantar Happy Birthday Mr. Kennedy a John Kennedy en Nueva York.

Y la boda de Kourtney Kardashian y Travis Barker ha servido para confirmar que su furor por los vestidos de archivo se ha extendido a todo el clan. Todas ellas optaron por diseños vintage de colecciones de Dolce & Gabbana comprendidas entre 1991 y 2001.

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Kim Kardashian tiene al alcance de su mano (y de su cuenta corriente) vestir cualquier diseño que se le pase por la cabeza. Así que no es difícil imaginarla adquiriendo a algún vendedor privado o en una subasta algunas de los vestidos más icónicos de Lady Di.

En junio de 1997, solo dos meses antes de que Diana de Gales falleciera en un accidente de tráfico en París, la casa de subastas Christie's sacó a la venta en Nueva York 79 vestidos que Lady Di había llevado en diferentes compromisos oficiales. Aquella subasta, cuyos beneficios iban destinados a organizaciones benéficas nacionales e internacionales contra el SIDA y el cáncer, permitió que muchos vestidos de Diana salieran del Palacio de Kensington para viajar a muchos lugares del mundo.

Repasamos cuáles de aquellos diseños icónicos podrían entrar fácilmente en el radar fashion de Kim Kardashian.

Fue en 1989 cuando Diana lució en Hong Kong el vestido diseñado por Catherine Walker y bautizado en honor al rey del rock. Un dos piezas con vestido palabra de honor de silueta ajustada y bolero de manga francesa y cuello subido con miles de perlas bordadas. La princesa volvió a lucirlo poco después para los Fashion Awards y la diseñadora de la pieza declaró tiempo después que no podía imaginar a otra persona luciendo ese diseño.

Si Kim Kardashian quisiera brillar sobre la alfombra roja con un vestido vintage en rojo y negro no dudaría en hacerse con uno de los diseños más recordados de Lady Di. Lo lució en París en noviembre de 1988 en una cena en la que ejercía de anfitrión el embajador británico en la capital gala.

Más de tres décadas después, el diseño no ha perdido ni un ápice de actualidad: con grandes flores en rojo y negro, el cuerpo drapeado y un favorecedor escote asimétrico, estaba firmado por la que sin duda era la modista de cabecera de la royal, Catherine Walker, en quien también confía a menudo Kate Middleton.

En sus giras por Australia Lady Di siempre impresionaba con los looks que llevaba en su maleta. Entre los looks de Diana que permanecen en la retina está el vestido strapless en tafetán de seda con estampado de flores, abertura lateral y cola que lució en enero de 1988. Un diseño que Kim defendería a la perfección en cualquier alfombra roja.

Kim Kardashian nunca ha tenido miedo a la hora de combinar colores y Diana de Gales tampoco. No cuesta imaginar a la empresaria y creadora de Skims luciendo para una de sus cenas en algún selecto restaurante de Los Ángeles el vestido de chifón rojo con una banda morada en el mismo tejido que creaba un favorecedor escote asimétrico.

Diana lo lució para la representación de Aída en Londres, en junio de 1988. Este diseño de Catherine Walker evidenciaba uno de los dúos de color favoritos de Lady Di, que lució en muchas otras ocasiones.

En diciembre de 1987 Lady Di acudió al estreno del ballet Cenicienta en la Royal Opera House, en Covent Garden. Diana se convirtió en el foco de todas las miradas con un vestido diseñado por Murray Arbeid, en color azul noche con estrellas bordadas. Un diseño palabra de honor y de silueta ajustada que terminaba en una falda de varias capas de tul. El vestido fue comprado por Pat Kerr Tigrett en la subasta de Christie's de 1997 y por su silueta seguro que estaría entre los favoritos de Kim Kardashian.

El color rojo es uno de los más repetidos por ambas. En la subasta que se celebró en Nueva York hace 25 años, Diana donó muchos vestidos en este tono. Uno de los más favorecedores y atemporales era un diseño de escote en V con fajín y falda recta que Lady Di lució para asistir a la ópera en Washington en la primavera de 1990.

Una silueta que le hemos visto a Kim Kardashian en más de una ocasión y que treinta años después no desentonaría en ningún evento.